Admito que es una obviedad pero me repugna lo que nuestras (respetadas) autoridades sanitarias se han aprovechado de ella y en vez de apoyarla, dotarla de recursos, engrandecerla y mimarla han maltratado a todos y cada uno de su componentes, cada uno de los profesionales abnegados que la forman y cómo ha dilapidado el inmenso valor de lo mejor que teníamos todos… Me refiero a la (largamente vilipendiada) Atención Primaria (ver en https://www.neyro.com/2019/ 05/20/desgaste-profesional- del-medico-espanol-o-sindrome- de-burnout/)
Y para no dejar nada a la imaginación del lector sobre lo que afirmamos (y tenemos MUCHAS pruebas…), baste decir que la obviedad a la que nos referíamos al comienzo de esta noticia es esa tontería que nuestras ínclitas autoridades suelen emplear para definirla cuando señalan que la «atención primaria es la verdadera puerta del sistema sanitario, donde se establece el primer contacto entre el ciudadano y su sanidad»… En fin…, con la que está cayendo….(y si no lo cree, vea nuestro pronóstico de primeros de abril de 2020 cuando afirmábamos que…https://www.neyro.com/ 2020/04/06/acuerdate-de-los- sanitarios-que-estuvimos-ahi/)
Efectivamente son los primeros, la fuerza de choque, el primer parapeto de la salud para contener cualquier enfermedad. Por eso no se entiende el maltrato al que nuestras (respetadas) autoridades sanitarias viene sometiendo hace ya más de 25 años al sistema de primaria en un país tan bien organizado como este que nos ha tocado en suerte vivir en el sur de una Europa que se empobrece en vez de avanzar…. Y lo son también para detectar a veces, escudriñar en ocasiones, averiguar con tacto y ayudar siempre cuando se sospecha un caso de violencia contra una mujer.
Abordamos el asunto en diversas ocasiones en este blog (ver en https://www.neyro.com/2016/ 06/24/violencia-de-genero-un- analisis-desde-la-perspectiva- de-la-clinica-diaria/). Ahora nos encontramos con una publicación muy ioteresante que reci9entemente ha visto la luz; con el fin de conocer las potencialidades y los límites para identificar situaciones de violencia contra las mujeres por parte de profesionales sanitarios en el ámbito de Atención Primaria, los autores llevaron a cabo un estudio exploratorio y descriptivo con enfoque cualitativo en un municipio de Rio Grande do Sul, Brasil. Los participantes fueron 21 facultativos de 3 unidades de Estrategia Salud de la Familia y una Unidad Básica de Salud.
El estudio se ha publicado con el título » Violencia contra las mujeres en la atención primaria de salud: potencialidades y limitaciones para la identificación » (originalmente «Violence against women in Primary Health Care: Potentialities and limitations to identification») y lo firman Jaqueline Arboit , Stela Maris de Mello Padoin y Letícia Becker Vieira de la Federal University of Santa Maria, Santa Maria, Brazil y la Federal University of Rio Grande do Sul, Porto Alegre, Brazil. Ha visto la luz en Aten Primaria. 2020 Jan; 52(1): 14-21.y se encuentra a disposición del lector interesado en https://www.elsevier.es/es- revista-atencion-primaria-27- articulo-violence-against- women-in-primary- S0212656718301215 en la revista cuya portada reproducimos ahora.
Las autoras afirman que se realizaron entrevistas semiestructuradas individuales para recopilar datos sociodemográficos y profesionales relacionados con potencialidades y límites para identificar situaciones de violencia. Los datos fueron sistematizados y analizados a través del análisis de contenido según las categorías analíticas red de atención a la salud y género.
Los aspectos potenciales para la identificación fueron, entre otros: la experiencia del profesional, la acogida, el vínculo y la escucha atenta del relato de la mujer, hijos y/o vecinos y su comportamiento; reconocer las lesiones, cuando estuvieren presentes; la consulta prenatal y la visita domiciliaria. Los límites fueron el silencio, la negación o no reconocimiento de la violencia (nada infrecuente por desgracia…), la falta de la denuncia por la mujer; el miedo y culpabilidad; el déficit y la falta de preparación del equipo; y el miedo debido a la presencia del agresor.
Es importante conocer el potencial de la Atención Primaria y promover la calificación de los profesionales para la identificación de situaciones de violencia, leer entre las quejas (in)visibles y poner freno a la violencia de género. No pensemos que el agresor, los agresiores en general, se detiene ante situaciones tan especiales como el mismo embarazo, ncluso; puede el lector interesado ampliar su visión de este tema en https://www.neyro.com/2020/ 06/01/influencia-de-la- violencia-de-genero-ejercida- sobre-las-embarazadas-en-el- desarrollo-de-su-gestacion/