El responsable de contenidos de www.neyro,com, el ginecólogo José Luis Neyro, comenzó a realizar procedimientos de cirugía mayor en régimen ambulatorio hace más de dos décadas, «cuando todavía, en los iniciales años 90 del pasado siglo, pocos creían en esta forma de ayudar a nuestras pacientes» recuerda con algo de nostalgia. Recuerdo, continua, que en mi centro, los mayores nos decían que hacíamos «cirugías de la señorita Pepis» en alusión a un juguete infantil.
Hoy, el tiempo, la historia les ha dado la razón a muchos de aquellos pioneros y se reconoce que la proporción creciente de intervenciones quirúrgicas que se llevan a cabo en forma ambulatoria en las últimas décadas ha sido bueno para los pacientes y una utilización mucho más eficiente de los recursos del NHS (servicio nacional de salud), dice John Appleby, economista principal en King’ Fund, en un estudio de datos estadísticos publicado en The BMJ (British Medical Journal).
El artículo explica que, en 1990, un análisis realizado por la Comisión de Auditoría señaló que si todas las autoridades sanitarias en Inglaterra y Gales efectuasen en forma ambulatoria las intervenciones quirúrgicas para 20 procedimientos comunes, como operaciones de cataratas y colecistectomía, «se podrían tratar unos 186.000 pacientes más cada año sin que se incrementaran los costos».
El Dr. Neyro, uno de los pioneros igualmente de la cirugía endoscópica en España, realizó su primera Histerectomía abdominal Laparoscópica en 1995 y al de poco tiempo se creaban en su centro las unidades de cirugía mayor ambulatoria con recuperaciones en UCSI (unidades de cirugía sin ingreso), que facilitaban los postoperatorios y la recuperación plena de las pacientes de forma mucho más temprana que lo que era ordinario en aquellos momentos.
Después del análisis del estudio aludido, el Departamento de Salud estableció una comisión sobre las intervenciones quirúrgicas durante el día junto con 15 millones de libras esterlinas (21 millones de euros, 23 millones de dólares) de fondos de capital para expandir el número de unidades especiales para tratamiento quirúrgico ambulatorio. Hacia el 2001, casi todos los centros de beneficencia contaban por lo menos con una unidad.
En un análisis de seguimiento en 2001 se ejerció presión para que se avanzara más: «Si todos los centros pudiesen lograr los niveles de los que tienen el mejor desempeño (el cuartil superior de la distribución del porcentaje de casos ambulatorios), se podría tratar a 120.000 pacientes hospitalizados en la actualidad en Inglaterra y Gales como casos ambulatorios para beneficio de todos los interesados».
Appleby muestra que en 1974 alrededor de 7% (417.000) de todos los procedimientos electivos y no electivos en Inglaterra fueron realizados como casos ambulatorios. Esta proporción aumentó a cerca de 35 millones (6,3 millones) hacia el 2013. En aquella época, apenas iniciaba mis estudios de medicina, pero no eran ambulatorias ni las ligaduras de trompas.
Dado que los pacientes ambulatorios representan un menor costo de tratamiento que los pacientes que permanecen por la noche hospitalizados (en 2013 a 2014, el costo por caso ambulatorio promedio fue de 698 libras esterlinas y el caso promedio de paciente hospitalizado electivo fue 3375 libras), la proporción creciente de la actividad de casos ambulatorios ha llevado a reducir los costos globales, señala. Pero imagínense si no hubiese ocurrido el cambio a los casos ambulatorios, dice Appleby.
Con base en los costos de referencia nacionales informados por los hospitales ingleses, el costo total de tratar a los 6,96 millones de pacientes electivos ambulatorios y hospitalizados en 2013 fue de 8900 millones de libras esterlinas. Tratar a este número de pacientes, pero con la proporción de los casos ambulatorios que se observaron en 1998, tendría un costo de casi 11.000 millones de libras esterlinas (casi 22% más).
Al tratar a un mayor número de pacientes en forma ambulatoria, Appleby estima que el NHS se ahorró en efecto alrededor de 2000 millones de libras esterlinas en 2013, aunque resalta que es probable que esto sea una sobreestimación, ya que está basado en los costos promedio de los casos ambulatorios y de los pacientes hospitalizados electivos.
Aun cuando los casos ambulatorios ahora constituyen casi 80% de todos los procedimientos electivos cada año, es probable que todavía pueda haber más incrementos, añade.
«Suponiendo que la proporción de casos ambulatorios siga incrementando al mismo ritmo durante la siguiente década, como ha ocurrido en los 15 años desde 1998, si no se modifica ningún otro factor, entonces el dispendio total en cuidados electivos en 2013 pagaría por el 22% de mayores episodios de pacientes en 2023», termina diciendo.