Se ha afirmado que gran parte de la actividad sexual de nuestra especie tiene que ver con el hecho biológico de que la hembra tiene una ovulación encriptada, oculta, sin determinantes físicos que nos permitan identificar el mejor momento para la cópula, sin nada que modifique físicamente su organismo y que permita al macho distinguir el mejor momento para el acercamiento por lo tanto.
Las mujeres no tienen celo en el sentido zoológico del término pues los instintos sexuales no están solo orientados a la perpetuación de la especie sino que han sido superados hasta conformar una parte importante de nuestra naturaleza, que va más allá de la propia perpetuación de la especie.
En el programa Objetivo Bizkaia, presentado y dirigido por a encantadora Susana Porras de la cadena Tele7, hace unos días el doctor José Luis Neyro, colaborador habitual del espacio, presentó algunos datos relevantes sobre las circunstancias diferenciadoras de la concepción natural y la fertilización asistida. En la base de la reproducción asistida, las modernas técnicas incluyen la inseminación artificial y todas sus variantes y, por otro lado, todos los modos de la fecundación artificial o fecundación in vitro. Cómo hemos pasado en poco tiempo de una a otra se sepasó a lo largo de una charla distendida e informativa.
El asunto no es baladí; en 2010 la Academia Sueca de las Artes y las Ciencias reconoció el importantísimo impulso que la investigación recibió con la fecundación in vitro en humanos hasta el extremo de conceder el premio Nobel de ese año en la categoría de Fisiología y Medicina al investigador británico Robert Edwards, tal y como recogimos en este web unos días más tarde de aquella ocasión. Puede leer se en el link http://www.neyro.com/2010/10/ 05/nobel-de-medicina-2010- para-el-padre-de-la- fecundacion-in-vitro/
El desarrollo íntegro del programa de tele 7 está en